La batalla se aproxima
Por mucho que corras, por más que busques refugio en los confines de la galaxia. No hay una nave demasiado vieja ni un piloto demasiado insignificante para no ser tenidos en cuenta. No hay manera de escapar a la lucha definitiva entre el lado Oscuro y el lado Luminoso de la Fuerza. ¡Ha llegado el momento de enfrentarte al enemigo! Se aproxima la undécima oleada de expansiones de Star Wars: X-Wing.
El bombardero Scurrg H-6, la cañonera Auzituck y el TIE Agresor pronto se unirán a la batalla. Con un trío de naves especiales que sobresalen en múltiples aspectos, la nueva oleada de expansiones llega pisando fuerte desde el borde exterior. Vienen para reforzar a las tres facciones principales del juego, inmersas en una guerra en la que está en juego el destino de innumerables sistemas estelares. Para saber más sobre estas naves hablamos con los desarrolladores de Star Wars: X-Wing, Max Brooke y Alex Davy.
Fantasy Flight Games: ¿Cómo se eligieron las naves de esta undécima oleada de expansiones?
Alex Davy: Bueno, siempre estamos buscando añadir algo nuevo con cada oleada. Vimos que, por ejemplo, la facción Escoria y villanos carecía de un bombardero pesado y que una nave como el Auzituck nos permitía reforzar las naves pequeñas.
Max Brooke: Como siempre, la decisión involucró a mucha gente. Propusimos varias naves y estábamos de acuerdo en avanzar con algunas de ellas. Además, llevábamos tiempo queriendo hacer el Scurrg y esta parecía la ocasión perfecta.
FFG: Mencionáis que siempre buscáis añadir algo nuevo con cada expansión. ¿Ha pesado más el diseño de las naves o sus prestaciones en la decisión? ¿Qué otras cosas habéis tenido en cuenta para diseñarlas?
MB: Uno de nuestros objetivos generales con Star Wars: X-Wing es asegurarnos de que cada nave tenga algo de interesante desde el punto de vista técnico. En esta oleada, se trataba de expandirse a nichos que no habíamos explorado particularmente en cada facción más que de desarrollar nuevas mecánicas.
AD: Exacto. Las nuevas prestaciones son solo herramientas para cambiar el juego. Cuando los Rebeldes consiguieron el Z-95 en la oleada IV, por ejemplo, consiguieron una nave extremadamente ofensiva que abrió un buen número de posibilidades de mejora para la facción. Por supuesto el juego ha crecido mucho desde entonces y hoy en día nos cuesta más encontrar margen de mejora.
FFG: ¿Cómo creéis que estas naves cumplen esos objetivos de mejora?
MB: La Auzituck es una nave muy singular para volar. Es muy difícil de manejar, pero como no tiene maniobras que le permitan girar 180 grados tienes que pensar los patrones de movimiento de forma diferente que en otras naves pequeñas. Aún así proporciona a los Rebeldes una nave cuyo campo de actuación puede ser muy difícil de evadir, lo que supone una ventaja táctica para ellos.
En el TIE Agresor, por su parte, tienes una torreta híbrida y una plataforma de artillería, con sus slots de misiles dobles que proporcionan al jugador oportunidades emocionantes. A pesar de la superposición de papeles que puede tener con el Ala-Y de la Rebelión es mucho más evasivo y puede hacer gala de una agilidad impresionante. Pero, a cambio, es mucho más frágil.
Conquista la galaxia o lucha por la libertad. Con las naves de la oleada XI puedes llevar el combate más lejos de lo que nunca hayas llegado y nadie sabe a cuantas vidas afectará quien venza o quien caiga derrotado.